Al empezar #julio2021 también empezaron las clases de natación de #SrtaDíaz, que adora el agua pero tiene muchos miedos, a los adultos, a no flotar, a no conocer a nadie…
¡Pero para empezar entró tan feliz a su clase! ¡Qué felicidad sentí como madre!
Primer día aprendiendo a nadar.
Y salió llorando. Dijo que no quería volver nunca más.
El problema (según ella) fue tirarse al agua, algo horrible. La primera vez, como no quería tirarse, la monitora agarró el churro que ella abrazaba y le lanzó a la piscina. Luego ya hizo de tripas corazón y se tiró sola.
Al volver a casa hemos trabajado su autoestima pensando trucos para saltar, para que el agua no entre en la nariz. Hablamos de formas para superar los miedos, y finalmente preparamos un amuleto.
Segundo día
Aunque ahora la dejé charlando animadamente con su amiga (¡Qué importante es tener amigos!) no me quedé muy convencida.
Pese a todo, salió contenta. Dijo que los trucos habían funcionado y que se había tirado ella sola.
Primera semana completa.
Ésos dos días nos sirvieron para conocer de qué manera irían las cosas, y para mi sorpresa, los siguientes días salió cada vez más contenta, sin olvidar su amuleto, pero contenta.
Han pasado de usar churro y burbuja, a ir quitándole ladrillos a la burbuja y a nadar con un sólo brazo libre. También han usado tablas para saltar más cerca del agua y reforzar las piernas.
Ayer mismo ya salió diciendo que se habían tirado al agua sin nada ¡Qué rapidez!
Un año diferente.
La verdad es que éste año todo está siendo diferente. No está abierto el bar de la piscina y tenemos que ir algo más lejos a esperarles, o buscar una buena sombra mientras dura la clase. Es poco tiempo para ir y volver a casa, o al menos la piscina está lo suficientemente lejos como para pensarlo.
Tampoco hay vestuarios suficientes para el cambio de ropa y las madres se quejan de tener que traerlos ya en ropa de baño, pero es lo que hay. Lo más importante es la seguridad y que aprendan bien para tranquilidad de todos.
Sirena.
Ahora pienso que quizá sí tenían razón quienes aseguraban que los hijos aprenden más con alguien que no es de su familia. Son tan listos que nos tienen el punto calculado y saben dónde apretar… Y éso no ocurre con las monitoras de natación.
Semana y media y ya tengo una sirena en casa.
Historias fabulosas 
Lo que me ha costado a mí aprender a nadar!!, muchísimo!! Será por miedo o por lo que sea para algunas personas se vuelve un reto de por vida. Una vez superado disfrutar del agua es un placer.
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A mí me costó hasta que encontré el monitor adecuado, en el momento adecuado… De peque me daba más vergüenza a ser la más grandullona que cualquier otro miedo.
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Que importante es trabajar la autoestima y la seguridad en nuestros hijos. Ellos, que pueden con todo aun a pesar de sus miedos, necesitan nuestro soporte para convencerse que de son capaces de lograr lo que se propongan. Y así ahí tienes a tu sirena, feliz y contenta, nadando como un pececito feliz.
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Así es, nos han de ver seguras para transmitirles ésa confianza en sí mismos.
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¡Hola!
Sin duda, después de leerte, tengo que decir que bravo por ti.
Es importantísimo que en situaciones que les creen conflictos sepamos abordarlas y poder trabajar su autoestima y seguridad. Creo que muchas veces, y ojo, lo digo mirando desde fuera porque no soy mami, se peca de eso, De no hablarlo con ellos.
Por otro lado, es verdad que cuando se aprende salgo sea cual sea su índole, con «desconocidos» a veces es mejor, ya que sin darnos cuenta tendimos a sobreprotejerlos o a no darles el espacio que necesitan para realmente aprender. Pero ojo, esa es solo mi opinión.
Espero que tanto tú como tu sirena, disfrutéis de lo grande del verano.
Besotes
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Muchas gracias tesoro, intentando siempre dar lo mejor de una es como más felices nos sentimos. En éste caso, como en todos, tratando de tener empatía.
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Qué cambio tan radical en poco tiempo. Al final hay que perderle el miedo. Lo que no entiendo es que no hayan adaptado el vestuario o los turnos para que no se den esas situaciones,bss!
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Yo tampoco lo entiendo, igual es para que las madres no pasemos y hagamos grupitos, no sé.
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Pues nadar es una asignatura pendiente para mi, será que le tengo un poco de temor al mar, creo que es importante aprender a nadar, nunca se sabe, me parece bien que tu pequeña esté aprendiendo tan rápido y que puedan disfrutar de playa o piscina sin preocupaciones
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